-Primer pokemon atrapado-

Oliver había escuchado varias veces el rumor de que algunos pokemones se habían dado a la fuga rumbo al volcán. Lleno de curiosidad decidió ir a paso tranquilo a dicho lugar con la compañía de sus "hermosos y sumisos" pokemones: Lucifer, Satán y Anubis. Siendo él una persona que adoraba la comida, por no llamarse gordo, llevaba un poco de comida tanto para humano como para pokemon. Quizás comer mientras buscaban ablandaría la actitud de sus compañeros hacia él. Al llegar al bosque pudo ver el volcán en todo su esplendor. Era una suerte que estuviese inactivo o estaría en peligro. Era un entorno tranquilo. Escuchaba los arbustos y árboles moverse a la par del viento meciendolos. El sol estaba a su mayor fuerza, era medio día por lo que todo estaba iluminado. Oliver paro en su camino y soltó un suspiro de cansancio. Llevaba mucho caminando, al menos tres horas. "A este paso voy a morir." Se quejó mentalmente, unos cuantos metros más adelante que sus pokemones. Estos correteaban por los alrededores pero cuidando no alejarse del pelirrojo. Llegó un momento en el que dijo basta. Se detuvo y abrió su maleta. Sacó un paquete de galletas para abrirlo y llevar una a su boca. Llamó a sus pokemones y les ofreció una a los tres. Pero escucho ramas partirse y algo moverse entre las hojas de los arbustos. Provenían de uno de ellos muy cerca de él. Con curiosidad, Oliver se acercó a inspeccionar. De las hojas verdes se asomó la pequeña cabeza de color amarillo y blanca de un pokemon. Sobresaliendo de la, dos enormes orejas con pelaje rojizo en su interior. Era un pequeño Fennekin. Los dos se miraron directamente, sin decir nada y reinando el silencio. Oliver ladeo la cabeza y el pokemon lo imito. Sumamente tierno. Sonrío con cariño y metió una de sus manos al paquete, sacando una galleta para el pequeño. Extendió su mano hacia el Fennekin.
-Tranquilo, ni quiero lastimarte.- murmuro sonriéndole sin romper el contacto visual. El Fennekin, aun con duda, fue acercándose con pasos cortos. Olfateó la galleta que se le era ofrecida. Oliver al ver que no tenía su confianza, dejó la galleta en el suelo ara que se acercara sin miedo. El pokemon se acercó de inmediato y la comió con gusto. Oliver le dio una ultima mirada y se levantó, dando por terminado su descanso. Comenzó a caminar a la par que sus pokemones. Anubis se le acero a un lado.
-"Creo que alguien nos sigue."- lo escuchó hablar en su mente. Satán se acercó también, subiendo a su hombro.
-¿Eh? ¿Quién?- el pelirrojo se giró mientras preguntaba, se encontró con las misma orejas de antes metidas en un arbusto cercano a ellos. -¿El Fennekin?-
-"Llevémoslo a casa."- comento Lucifer colocándose en el otro hombro libre.
-Pero... Aun no sabemos si él quiere eso. No me gustaría llevarlo en su contra.-
-"Si él no quiere se irá solo. Además, tonto, recuerda que el profesor nos pidió traer a los pokemones iniciales."- continuó persuadiéndolo.
...
-"...Ha funcionado, al menos"- dijo Satan, siguiendo con la mirada al rayo amarillo que correteaba por toda la habitacion de Oliver.
-Si...al menos- contesto en un murmullo, sin dejar de mirar al pokemon.
Los antes mencionados, voltearon lentamente su mirada para ver al otro Espurr, la cual miraba desinteresada sus uñas, aunque dejo de hacerlo al sentir dos pares de miradas sobre ella. -"...¿Que me miran?"- pregunto mirándolos a ambos. Primero a su trainer y luego a su hermano y viceversa.
Oliver suspiro y se cambio su ropa por el pijama, se había hecho muy tarde mientras volvía y tuvo que volver casi corriendo al ver salir pequeños puntos brillantes en el oscuro manto reinado por la luna, estrellas. Se acostó en su cama y luego de decir "Buenas noches" cayo dormido inmediatamente, estaba realmente cansado. 

En su sueño, podía verse como una gran montaña de helado se formaba, mientras que caían copos de chocolate del cielo. Crecieron rápidamente grandes paletas de caramelo de distintos colores, formando arboles. Los arbustos al lado de cada árbol, al igual que las nubes, era de algodón de azúcar. El rio que pasaba a su lado era de malteada de vainilla, con peces de goma saborizada dentro de ella, nadando felizmente. Serpientes tambien de goma, coloridas y con azucar encima se deslizaban por el suelo y algunas por los troncos de las paletas. El pelirrojo lanzo un suspiro ensoñador y se dejo caer de espaldas en el helado, comenzando a hacer figuras de angeles.
-"...Que gordo eres..."- dijo Lucifer flotando por el cielo, yendo junto a Oliver.
- ¿Porque lo dices?- pregunta abriendo la boca para que algún copo de chocolate cayera dentro de ella. 
-"¿Quizás porque estas soñando con comida?...Otra vez" contesto esta vez Satan, dejándose caer sobre el estomago del pelirrojo que estaba calentito. 
-No me importa, tengo un coffler nuevo- respondió sacando uno de quien sabe donde y comiendo un trozo, saboreandolo con extrema felicidad en su rostro, como la de los pecesitos nadando en la malteada.
Sus Espurr, casi siempre, solían meterse en sus sueños, ya sea para molestarle, estar con el o avisarle de algo que estaba ocurriendo para que se despierte. 
-"Señor "No me importa, tengo un coffler nuevo" debería despertarse, esta por ocurrir algo mientras duermes"- Hablo Lucifer, sin dejar de flotar cerca de su trainer.
-¿Eh?- pregunto confundido, dejando de comer y mirando a la Espurr que estaba flotando
-DESPIERTA!-

Y justo en ese momento abrió los ojos, viendo la oscuridad de su cuarto y escuchando a los pokemones nocturnos que estaban cerca de la academia. Frunció el ceño levemente enojad ¿Porque le habían despertado sus Espurr? Ellos mas que nadie sabían que no le gustaba que le despertasen. Y luego de hacerse esa pregunta, sintió un peso extra en su cama y se tenso levemente. Aparto la mirada y solo podía ver a sus dos Espurr y al Riolu durmiendo, y eso solo incremento su pequeño miedo que empezaba a nacer en su pecho. ¿Quien mas estaba con él despierto?
...El Fennekin...
Bajo la mirada y ahí estaba el zorro, mirándolo con extrañamente sus ojos oliva como los suyos  brillando en la oscuridad, completamente quieto. Y mas extraño aun, parecía estar sonriendo y mostrando sus filosos dientes caninos. Trago saliva paralizado, sin saber que hacer.
-E-ehh...hola- murmuro con una sonrisa nerviosa y sintiendo un sudor frió recorriéndole el cuello al ver la intensa mirada del pokemon, que seguía quieto como estatua. -¿q-que sucede? Deja de mirarme así- volvió a hablar, encogiéndose en si mismo- ¿Quieres que abra la vent-- no pudo terminar de hablar ya que el pokemon rápidamente dio un salto y abrió su boca soltando un grito y mordiéndole la cara, a lo que Oliver se levanto con velocidad chillando del susto y, como pudo, se lo saco de encima. Lo alejo de su rostro y miro al pokemon que tenia en brazos, que movía la cola.
-...Creo que ya se como llamarte- murmuro haciendo una mueca y recibiendo un alarido de felicidad de parte del zorro.

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 Fennekin
Nombre: Foxy
Sexo: Macho
Nivel: 10
Naturaleza: Picara

DIOSSSSSS
ES LA PRIMERA VEZ EN NO SE CUANTO TIEMPO QUE HAGO UN ESCRITO ASI DE LARGO
Tuve un monton de ayuda, ya que no sabia como escribirlo y una amiga me ayudo con el principio, gracias a ella por eso ♥
yyy
ahora Oliver tiene otro integrante en el equipo que le hara bullying(???kha